‘Buda az sharm foru rikht’. Necesaria.

Apenas dieciocho primaveras parecía tener Hana Makhmalbaf cuando se sacó del corazón esta joya de título tan explosivo. La película se vertebra en torno a una historia del todo sencilla: el afán de una muchachita en poder ir a la escuela para aprender a leer historias.

Las andanzas de nuestra protagonista nos tocarán la fibra sensible. El excesivo paternalismo de su sociedad, las desigualdades sociales ya existentes (increíble la compra del cuaderno y los huevos) y, sobre todo, el contexto tan radicalizado en el que parecen situarse esas cuevas con forma de hogar (desgarradores juegos de niños), sirven como pretexto para que la autora iraní realice un auténtico alegato en pro de la transformación, en pro de una mejora de vida para las mujeres de estas sociedades (no ya sólo la Afganistán de los talibanes). Pone claramente en el punto de mira a los fundamentalistas, y no duda en dispararles entre ceja y ceja. Arriesgada y necesaria película.