‘La sombra del poder’. Oportunidad desperdiciada.

Ben Affleck está en contra del mundo. Quiero decir, en contra de buena parte de la industria armamentística estadounidense. Casi nada. Y es que el bueno de Affleck, congresista republicano, ha decido lanzar una feroz campaña en contra de la privatización y deslocalización, qué conceptos tan modernos, del ámbito de Seguridad estatal del país. Es decir, estamos ante la pesadilla, ciertamente planteable hoy en día, de privatizar el ejército de Estados Unidos, un ejército de mercenarios puros y duros. La cosa no anda muy alejada de la realidad, quiero decir, el combinar negocio y guerra, pero aquí se le da un puntito más a tan diabólica idea.

El caso es que, en medio de esa cruzada, se da un asesinato doble. Un periodista, Russell Crowe, amigo del congresista Affleck, cubrirá la noticia. Eso no sería de extrañar si no fuera porque al poco tiempo, la asesora de Affleck también apareciese muerta en extrañas circunstancias. Algo raro comenza a suceder. ¿Cómo es posible que una de las asesoras del congresista aparezca muerta en mitad de la campañana antiprivatización? Habrá que indagar en ello.

Spoiler

Joder que si indagan. Con lo bien que apuntaba, y acaba desmoronándose todo en una patraña de final que acaba por joder al conjunto del film. Era muy creíble ver al pobre desgraciado de Affleck reencarnando al JFK del siglo XXI. Uno se podía imaginar que los oscuros entresijos del capital habían alcanzado a «chicas fáciles», congresistas, militares, yonkis y todo el que se les pusiera por delante con tal de rentabilizar su negocio, con tal de no detenerlo. Toda la investigación, es decir, el film en sí, había sido intrigante, emocionante y muy realista. Te carcome, te enerva la sangre, te pone de mala leche cada paso dado por Crowe y su compañera hacia la verdad, desenmascarando al capital, viendo como al estirar el hilo comienza a salir la corrupción política y el mafioseo empresarial.

Pero todo se jode al final. ¿Por qué? ¿por qué todo acaba con el mensaje de que Ben es malo? y ¿qué coño pinta un militar desquiciado abriendo un mar de sangre y llevándose por delante a la amiguita del congresista? ¿tanto jaleo por un lío de faldas y unos celos de más? Por favor Macdonald,  ¿por qué lo has reducido todo a eso? Desperdiciada.

 

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